5. Comprender, luego ser comprendido

Hábito 5: Buscar primero comprender y luego ser comprendido

Este hábito como clave de la comunicación.

En nuestras relaciones diarias nos comunicamos con muchas personas y mantenemos conversaciones de diversos tipos. Se ha fijado cómo son sus respuestas a alguna de estas conversaciones? Cuánto interés real siente hacia la información que le comunica su interlocutor? Está realmente escuchando lo que le dicen?... El hábito cinco nos enseña una mejor manera de comunicarnos; ya que la clave para comunicarse y tener poder e influencia sobre los demás puede resumirse en una sola frase: busca primero comprender , luego ser comprendido. En otras palabras,escucha primero y habla después.”

Si puedes aprender este simple hábito, ver las cosas desde el punto de vista de otra persona antes de hablar del propio, se te abrirá todo un nuevo mundo de comprensión.

¿Por qué este hábito es la clave de la comunicación? Porque la necesidad más profunda del corazón humano es ser comprendido. Todos deseamos ser valorados y respetados por lo que somos: individuos únicos en su tipo.

Malos Estilos de Escuchar

No prestar atención

Distraerse: alguien nos habla, estamos pensando en otra cosa y no prestamos atención. 

Fingir que se escucha:no ponemos mucha atención y solo respondemos con aja, si, claro, tienes razón, etc. 

Escuchar selectivamente: cuando le ponemos cuidado solo a una parte de la conversación y no escuchamos la totalidad, entonces perdemos contexto. 

Escuchar solo las palabras: cuando escuchamos solo las palabras pero no lo que realmente nos está expresando el otro, los sentimientos, o el verdadero significado detrás de las palabras. 

Escuchar de forma egocéntrica: es cuando vemos todo desde nuestro punto de vista y contestamos “Eso no es nada, imagínate lo que me pasó a mi.” Por otro lado cuando escuchamos en esta forma generalmente lo que hacemos es juzgar, aconsejar y sondear.

Deseo de ser escuchado

Muchas veces la otra persona solo quiere que las escuchemos, sin que la juzguemos ni le demos consejos o le hagamos mas preguntas para sondearla. Solo desea ser escuchada.

Escuchar Genuinamente

1. Escuchar con ojos, corazón y oídos

Entender lo que nos están diciendo 

Solo el 7% de la comunicación son las palabras, el 53% es el lenguaje corporal y es 40% restante es el tono y sentimiento que refleja la voz. Debemos tratar de percibir todos los sentimientos detrás de las palabras y eso solo lo lograremos si nos interesamos realmente en lo que nos están diciendo; de esta forma nuestro interlocutor se sentirá entendido, aún más si entendemos lo que no nos está diciendo.

2. Ponerse en el lugar del otro

Ponernos en el lugar de otro

Para lograr escuchar realmente, debemos salirnos de nuestros zapatos y ponernos los del otro. Tratar de entenderlo desde su punto de vista, no desde el nuestro, ya que la conversación no se trata de una competencia para saber quién tiene la razón. Cuando existe algún conflicto, ponernos en el lugar del otro y entender sus motivaciones nos ayudará a solucionarlo más fácilmente.

3. Practicar el reflejo

Entender más profundamente

Es una técnica en la que podremos interpretar lo que el otro nos está diciendo, con nuestras propias palabras. No es repetir las palabras de la otra persona o imitarla. Esta técnica también nos permitirá entender más profundamente los sentimientos y motivaciones del otro y nos ayudará a lograr acuerdos gana-gana.